Mandelroot


Dicen que los árboles nacidos para convertirse en violín suenan incluso al ser tocados en medio del bosque.

Desde este lóbrego y discreto rincón de Internet, por donde probablemente no pase nadie más que el carro de mis extravagancias, o el loco que busca una respuesta dibujando letras blancas en una pared tan negra, nos permitimos celebrar profundamente el regreso de Mandelrot a la blog-o-esfera. Lo hace renovando su interfaz, más versátil, en multimedio, aprovechando las ventajas de las redes sociales para llegarnos con más comodidad, pero con el mismo espíritu y el mismo toque que nos hizo engancharnos anteriormente.

Debo decir que nunca perdí la esperanza de que lo hiciese, su URL sigue en mi barra de favoritos, y nunca me planteé eliminar su reseña de la parte derecha de esta página. Gracias a él he disfrutado de infinidad de las más variopintas cosas, he aprendido un sinfín de ellas, y he participado en intensas y muy amenas conversaciones.

Pueden acceder como siempre.
O acercarse por su perfil de Facebook
O bien por su Twitter.
Si no disponen de redes sociales, entonces les recomiendo encarecidamente una suscripción.


[P.D]: Root*: Origen, raíz...de donde parte todo.

2 comentarios:

  1. Muchísimas gracias por tus palabras, que me "llegan" de verdad; tengo que reconocer que es que esto es un vicio y yo soy débil a la tentación :-p Ya sabes que yo he seguido todo lo que publicas desde el principio... Y aún antes, que te dije varias veces que estaba absolutamente seguro de que una persona tan interesante como tú diría cosas que los demás querríamos leer. Me alegro de haber acertado...

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  2. Bueno, sigue sirviendo como válvula de escape, aunque dudo que alguien pase por aquí no le doy importancia.
    No creo que sea tan interesante, de verdad te lo digo. Pero muchas gracias por tus palabras.

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